¡Hola! ¿Cómo estas? Te cuento que en esta ocasión quiero mostrarte un método japonés que con tan solo cinco pasos te permitirá conocer tu propósito personal, a través del método Ikigai, palabra que en el lenguaje japonés significa «tu razón de vivir»
La Organización mundial de la salud OMS, siempre nos recuerda que Japón es el país en el que la gente vive más años (83,7 de media, entre hombres y mujeres). Ahora bien, parece que los japoneses no solo son campeones en el arte de vivir mucho tiempo, sino también maestros en tener ganas de vivir. Es lo que esconde este concepto denominado Ikigai.
El Ikigai es una palabra japonesa que no tiene una traducción exacta. El Ikigai es el sentido de la vida o aquello que te hace levantarte con ilusión cada día. La palabra se compone uniendo iki, que significa “vida” o “estar vivo”, y gai, que significa “lo que vale la pena y tiene valor”. Traducido literalmente sería, pues, “aquello por lo que vale la pena vivir”. Según los japoneses, todos albergamos un Ikigai, o incluso varios, aunque aún no lo sepamos. Si eres una persona que ya ha encontrado su objetivo, que trabaja con ánimo y que siente alegre y feliz con lo que tiene, entonces probablemente ya tienes tu Ikigai. Pero si ese no es tu caso todavía, en la conversación de hoy vas a comprender por qué es importante conocer tu sentido en la vida. Y también descubrirás los cinco pasos que debes seguir para encontrar tu Ikigai.
Encontrar tu propósito te ayuda a entender por qué quieres lo que quieres. Creo que todos tenemos grandes sueños. Imaginamos tener ciertos recursos materiales, mejorar nuestro bienestar, ya sea en la salud o de en nuestras emociones o quizás tener la posibilidad de vivir alguna experiencia que nos parezca interesante, un viaje tal vez. A pesar de ello, a menudo nos olvidamos de preguntarnos por qué perseguimos estas metas.
Alguna vez te preguntaste ¿Por qué quieres tener esa casa, ese auto, ese teléfono? ¿Por qué quieres estar más feliz, perder peso, o hacer un viaje?¿Por qué quieres escribir un libro, lograr el nuevo puesto de trabajo, o terminar esa carrera?
Darte cuenta de los motivos que tienes para lograr tus objetivos, y que te hacen impulsan cada mañana, es sumamente importante porque ahí esta depositada una gran fuerza que te impulsa para ir por lo que quieres
Este tipo de motivación y determinación es capaz de mantenerte en el camino para conseguir tus metas. Es un estímulo mucho más poderoso que aquellas motivaciones transitorias que proviene de una frase leída en las redes sociales, un eslogan o un ejemplo de otros que te inspira
Quien consigue encontrar esta sabiduría para saber y saber hacer, con coherencia e integridad, encuentra su Ikigai.
Esta palabra y concepto fue creado en islas japonesas que son famosas por tener una esperanza de vida muy superior a la media. Una de las razones para explicar esta conservación de la vida es que las personas de ese lugar saben lo que les gusta hacer y se dedican a esas actividades durante toda su existencia…
Es esencial estar en sintonía en cada etapa la vida con nuestro Ikigai. De lo contrario, sentiremos que nos hemos desviado de nuestro propio camino y que todo lo que sucede a nuestro alrededor ha tomado el control nuestro día a día
«Al perder tu propósito, has perdido el camino«
Filosofo Friedrich Nietzsche
La teoría dice que, si podemos ganarnos la vida haciendo lo que nos gusta, tendemos a realizar nuestras actividades con mayor agrado, esmero y productividad. Por eso, conocer tu ikigai es conocer tu propia razón de vivir. Pero creo que en estos momentos te estarás preguntando ¿Cómo hacerlo?
Puedes encontrar tu Ikigai en solo 5 pasos
Existen varias técnicas para encontrar tu propósito. Aunque estas metodologías varían según la definición de propósito. Sin embargo, todas coinciden en un aspecto. Para encontrar tu propósito, tienes que mirar en tu interior. Necesitas tener una conversación honesta contigo mismo y darte unas buenas medidas de auto-conocimiento. De lo contrario, lo que crees que es tu propósito puede ser sencillamente lo que otras personas creen que es bueno para vos. Esto incluye a los miembros de tu familia, tus compañeros de trabajo, tus ídolos que sigues, e incluso la publicidad que ves por ahí. Para encontrar tu verdadera razón de vivir, aquí tienes cinco sencillos pasos, pero que tendrán impacto realmente profundo.
Paso 1. Empezar en pequeño
El primer paso para encontrar tu Ikigai es deshacerte de aquellos sueños de grandeza que parecen afectar a mucha nosotros hoy en día. Queremos tener mucho dinero, tener un cuerpo en forma, tener una carrera de éxito, tener una familia feliz, tener una casa bien decorada, tener el auto del año, tener, tener, tener …
Queremos tener tantas cosas que acabamos no teniendo casi nada. En este paso elige un solo dominio o área de tu vida que necesite mayor atención y mira cómo puedes mejorarla un poco. Deja de lado las fantasías de grandeza y empieza a construir tu razón de vivir poco a poco, pero de forma constante y que tenga sentido para una mayor planificación de tu vida.
Paso 2. Abandonar el pasado
El segundo paso es soltar las viejas ideas que pueden no estar alineadas con lo que realmente quieres en la vida. Por ejemplo, ¿quién dice que necesitas tener un cuerpo esbelto, una casa grande o el auto del año para sentirte más feliz? ¿Es esta tu verdadera necesidad, o es algo que ha venido de fuera – de tus compañeros, de familiares, de la publicidad – y que has interiorizado tanto que hoy realmente crees que es una idea tuya?
Para encontrar tu Ikigai, intenta liberarte de estas ideas y creencias preconcebidas y reflexiona cuidadosamente, analizándote a vos misma a vos mismo, para encontrar realmente lo que quieres en la vida.
Paso 3. Lograr equilibrio y sostenibilidad
No sirve de nada encontrar tu Ikigai si no trae armonía a tu vida y si no es sostenible a largo plazo. Utiliza estas preguntas como herramientas para ayudarte a encontrar tu Ikigai: ¿Esto es sostenible? ¿Se puede mantener esta actividad a largo plazo? ¿Se puede vivir de ello? ¿Mantendrás tu salud?
Mira al Ikigai como la intersección de cuatro círculos: Lo que amas, lo que el mundo necesita, lo que sabes haces bien, y lo que te hace ganar suficiente dinero para vivir. Si consigues encontrar una actividad que reúna estas cuatro cualidades, habrás encontrado tu razón de vivir.
Paso 4. Disfrutar de las pequeños momentos
El cuarto paso es no condicionar tu bienestar ni felicidad a si consigues grandes metas. Un error que muchas personas cometen al diseñar planes de vida es crear proyectos gigantescos y condicionar su felicidad propia a cumplirlos. Por ejemplo, supongamos que uno de tus grandes objetivos crear tu propio negocio. Esta puede ser una tarea árdua que te va a llevar mucho tiempo de dedicación y ahorro. Si solo te permites estar feliz cuando consigas poner tu propio negocio, te habrás enfrentado a meses o años de sacrificio por un solo momentos de alegría.
Sí, porque poco después de conseguir ese negocio de tus sueños, vas a buscar otras metas. Tu alegría pasará, y te establecerás nuevas y mayores metas a las que volverás a condicionar tu felicidad. Es un ciclo interminable. Hay una forma más inteligente de vivir la vida.
Consigue alegrarte por las pequeñas situaciones. Disfruta cada vez que tengas que sentarte a estudiar para tu posgrado. Alégrate por cada error que cometas al comenzar con tu negocio. Alégrate incluso cuando te veas condicionando tu propia felicidad a alcanzar una meta. Nuestra vida tiene muchos más momentos comunes que grandes momentos. Si solo te permites alegrarte cuando consigas grandes logros, te estarás condenando a una vida llena de insatisfacción con unos pocos momentos fugaces de felicidad.
Paso 5. Estar en el aquí y ahora
Por último, este método nos incita a aprender a vivir en el momento presente. Aprender a disfrutar de todo el viaje, y no solo del objetivo final. Muchas filosofías orientales nos advierten del riesgo de abandonar el ahora, de dejar de vivir en el momento presente. Y cuando nos centramos en el deseo, cuando nos centrados en lo que queremos o en lo que no queremos, estamos dejando de vivir en el ahora..
Y así es como abrimos las puertas al sufrimiento. La razón por la que sufrimos es el deseo inoportuno, el hábito de querer siempre anticipar el futuro, querer más y más, o de recordar el pasado, sin disfrutar nunca del momento presente.
Si nunca estamos satisfechos con el ahora, siempre queremos algo más. Esta es la principal causa de sufrimiento humano. Si estamos presentes, viviendo el momento presente por completo, no habría «querer» y «no querer»
Estaríamos en plenitud. Encontrar tu Ikigai es conocerte a ti mismo. Imagina por un momento que tienes una gran motivación para levantarte todos los días. Has encontrado un verdadero propósito. Una actividad que disfrutas, que la haces muy bien, que el mundo necesita y que, además, puede darte suficiente dinero para vivir.
Ahora te toca a vos imagina que caminaste por los cinco pasos que nos propone el Ikigai
¿Cómo afectará en tu calidad de vida?¿Cómo cambiará la forma en que vives tus días?¿Cómo afectaría a las personas que te rodean?
Puedes mirar dentro de ti hoy y seguir los cinco pasos que has aprendido aquí para encontrar tu razón de vivir.
Empieza pequeño, desecha las viejas ideas y busca algo que te brinde armonía y sostenibilidad. Recuerda alegrarte por las pequeñas cosas, y sobre todo, prestar atención al aquí y ahora. Encontrar ese propósito es un paso esencial para crear un plan de vida que esté realmente alineado con lo que más valoras
¿Se te ocurren otras posibilidades que no haya mencionado para encontrar nuestra razón de vivir? Me encantará conocerlas y así poder mejorar y crecer entre todos.
¡¡Abrazo y vamos por más!!